Publicado por: 0

Las distancias entre empresarios y sindicatos por el pacto salarial se van limando. Varias fuentes conocedoras de las negociaciones apuntan que el pacto podría situarse en una banda que situara el incremento salarial para este año entre el 1,2% y el 2,5%. Los líderes de las organizaciones implicadas (UGT, CC OO, CEOE y Cepyme), que han mantenido contactos telefónicos y reuniones en los últimos días, se han dado hasta el viernes para disipar de una vez por todas —en el sexto mes del año— si en 2017 habrá o no un acuerdo salarial que de guías para la negociación de convenios.

Aunque las posturas se han acercado en los últimos días, oficialmente sobre la mesa hay todavía varias posiciones. Está la oficial de CEOE, que supondría un entre el 1% y el 2%, más un 0,5% adicional en función de criterio como la productividad. También está la que se ha abierto paso en los últimos compases, que supone esa banda del 1,2% al 2,5%, una posición a la que se han acercado hasta ahora UGT, CEOE y Cepyme, apuntan las mismas fuentes.

CC OO no acaba de ver la última cifra, prefiere que el porcentaje de subida se sitúe más cerca del 3%, concretamente un 2,75%, un número que se acerca más a la banda que pusieron los sindicatos sobre la mesa hace ya tiempo (entre el 1,8% y el 3%).

El pacto, apuntan otras fuentes, también contaría con una cláusula de garantía parcial del poder adquisitivo de los salarios. Sería parcial porque solo se activaría si el IPC de final de año supera el 2%. En estos momentos, la inflación supera este porcentaje, pero también las previsiones de servicios de estudios como Funcas la sitúan en el 1,1%. Esto supondría que en los convenios con menores incrementos apenas se lograría recuperar poder adquisitivo.

Tampoco acabaría de garantizarse esa recuperación en aquellos convenios cuyo incremento se sitúe por debajo del 2% si finalmente la marcha de los precios vuelve a invertirse y suben más de lo previsto. Esa cláusula parcial garantiza la compensación desde el 2% de inflación: si la subida inicial es del 1,5% y el IPC de final de año llegara al 2,1%, la contrapartida sería por una décima.

Estos serían los únicos puntos del pacto si finalmente se cierra, ya que quedaría fueran fuera el resto de materias: absentismo laboral, mutuas, creación de un organismo de observación de la negociación colectiva.

Desde su llegada al liderazgo de UGT, Álvarez se ha mostrado contrario a suscribir un pacto como el suscrito en 2015, que solo recomendaba un porcentaje máximo de subida, por ejemplo, para 2016 era “hasta el 1,5%”. No obstante, también arrancó las negociaciones en septiembre pidiendo una subida máxima del 4%. CC OO, por su parte, se mostró más reticente a esa banda, aunque finalmente la aceptó.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *